La intensidad de un libro provoca que sus líneas queden latentes en tu cabeza durante varios días hasta que lo retomas, o que se instalen definitivamente si ya has leído el «Fin». En mi caso, tan sólo hace unas horas que terminé de leer Antes de conocerte y no consigo dejar de dar vueltas al final. O quizás al «ahí te quedas con esas», porque debo admitir que la forma de poner el punto y final para mí ha sido dramática. Cuando más se complican las cosas, cuando comienza un profundo punto de inflexión en la historia, llega el -en este caso- molesto final para arruinar el ansia de conocer qué va a ocurrir.

Es la primera obra de Indhira Jacobo, llegó a mí sin buscarla y ahora doy gracias infinitas por haberme permitido descubrirla. Espero poder leer la segunda parte, Te amaré por siempre, de la que acabo de descubrir su existencia y con la que espero poder poner ese ansiado final como Dios manda.

Y reconozco que cuando comencé a leerlo me causó cierto desconcierto; un prólogo que no me dijo mucho y que no hacía presagiar el transcurso de la obra me dio la bienvenida con un lenguaje algo obsceno, propio por otra parte del perfil de personaje que lo protagonizaba.

Sin embargo, la historia va enganchando a medida que van avanzando los capítulos; un grupo de chicas jóvenes comenzando su vida adulta, una intensa historia de amor prohibida y un sinfín de desencuentros y desengaños se van sucediendo, y se cuelan poco a poco en nuestro subconsciente hasta que nos resulta imposible desengancharnos.

Si me preguntáis qué tiene la historia de particular, realmente diría que no hay nada novedoso o nunca visto hasta ahora. Al fin y al cabo, la literatura romántica suele estar cortada toda por el mismo patrón, pero eso no significa que sea «una más». Al final, cada libro tiene su propia personalidad dibujada a partir de sus caracteres y del hilo de la trama. Y en este caso particularmente Adriana, Emma, Max, Sophia, Carlos y unos cuantos personajes más van configurando una historia digna del mejor y más apasionante culebrón.

Por otra parte, el cambio de parecer constante de unos y otros favorecerá un ritmo vertiginoso de la acción, aunque en ocasiones nos cause desazón el nuevo rumbo cuando nos habíamos acomodado a la historia.

En definitiva, una obra romántica y frenética para los más apasionados de este tipo de literatura. Y adictiva, muy adictiva, capaz de hacernos perder la noción del tiempo.

Antes de despedirme, quería agradecer una vez más a la autora el haberme dado la oportunidad de leer la obra. Muchas gracias por tu interés y mucho ánimo en tu labor de escribir, estoy convencida de que llegarás lejos.

Un saludo a tod@s y feliz lectura!

Lo mejor. Un libro adictivo, cuanto más leas más querrás saber.

Lo peor. El final; definitivamente se acaba cuando más interesante se torna.

Dónde leerlo. Si viajas a menudo, es el libro ideal para que se te pase el tiempo volando. Eso sí, ten cuidado y no te pases de parada!


Sinopsis (Fuente Amazon)

Imagina que llevas meses soñando con la misma persona. Te excitas… te obsesionas y hasta te enamoras. Maximiliano Lombardi es un empresario italiano de 24 años. En un viaje a Luxemburgo y en el momento menos esperado conoce a Adriana Brooks, una chica inteligente, independiente, sensual y segura de sí misma. Al instante se siente atraído por ella pero esta ni siquiera lo nota. La atracción del joven se convierte en anhelo en el momento que descubre que es la chica con la que lleva soñando desde hace tiempo. Cinco años después el destino los vuelve a unir. ¿Coincidencia? ¿Casualidad?.. ¡Quién sabe! Lo indudable es que está vez él vino para quedarse y dispuesto a usar todas sus armas contar de conquistarla. ¿Podrá Adriana resistir la tentación? ¿Podría una persona amar a alguien que nunca ha visto? Descúbrelo en esta historia cargada de pasión, deseo e intriga, donde el amor y la confianza serán puesto a prueba.